3 alternativas sostenibles (y sorprendentes) al aire acondicionado
Las olas de calor son un clásico del verano y tirar de aire acondicionado parece lo más recomendable… aunque abusar de él no sería lo más sostenible. Y hay días en que un ventilador se queda corto. Por suerte, hay alternativas que aunque quizá no sustituyen, ayudan.
Agosto ya ha llegado. 30 grados a la sombra en el mejor de los casos, más de 40 y con humedad en la peor pesadilla subtropical de esas de haber cenado fuerte… Ya hemos tenido alguna que otra ola de calor y estando en el ecuador del verano, probablemente nos queden algunas más. Y es que en esta época el aire acondicionado es, para quien lo tiene, su bien más preciado. Pero tanto si tenemos en cuenta el medio ambiente como si nos preocupa el ahorro, no es buena idea depender de él en exceso. Estas 3 alternativas sostenibles demuestran que combatir el calor de manera fácil y sostenible es posible.
El Eco Cooler
Este invento (en la foto de portada) lleva unos años moviéndose por blogs y foros especializados. Se trata de un aire acondicionado casero hecho con materiales reciclados y que además no necesita electricidad.
Consiste en un tablero con perforaciones alineadas a través de las que se colocan varias botellas de plástico cortadas por la mitad, de manera que la boca de cada botella quede en la parte interior y pueda fijarse al tablero simplemente enroscando el tapón. De esta forma la parte más gruesa de estas medias botellas quedaría en la parte exterior y ahí es donde empieza la magia.
Al colocar el panel con las botellas fijado en el marco de una ventana, el aire caliente entra por la parte ancha de las botellas y la diferencia de presión cuando llega a la parte estrecha baja la temperatura del aire unos grados, cuando va a entrar la estancia.
Puedes comprobar este efecto ahora mismo: si soplas en tu mano con la boca muy abierta, notarás que el aire es más bien caliente, mientras que si soplas con la boca casi cerrada (como silbando), el aire será más frío. Simple pero efectivo :)
El Eco Cooler es un invento desarrollado en Bangladesh por una compañía local, Grameen Intel Social Business, cuyo propósito es crear soluciones tecnológicas que estén al alcance de toda la población, independientemente del nivel económico. Una prueba de que su objetivo no era enriquecerse es que sus creadores compartieron las instrucciones de fabricación del aparato que ves en la imagen. Se trata de una alternativa eficiente al aire acondicionado lo mires por donde lo mires, ya que además de conseguir reducir la temperatura unos 5º en pocos minutos es una forma estupenda de reciclar plástico, ¡2×1!
El Zero Breeze Mark II
Este aire acondicionado alternativo sí está de rabiosa actualidad y es todo un éxito. Se trata de un aparato de aire acondicionado portátil que podrás llevarte de cámping o básicamente a donde tú quieras.
Funciona con dos tubos capaces de crear una corriente de aire en cualquier lugar, extrayendo el aire caliente para convertirlo en aire frío. Esta corriente puede enfriar una estancia o una zona concreta en unos 10 minutos. Su secreto radica en un mini-compresor “pequeño pero matón”, del tamaño de una lata de coca-cola, que permite que el diseño del Zero Breeze Mark II sea super compacto y ligero.
Funciona con una batería que se carga a través de un puerto USB-C y tiene una autonomía de 5 horas. Cuenta también con una luz led y su ruido es mínimo.
Ahora mismo se encuentra en fase de desarrollo pero ya ha batido récords de recaudación en la plataforma de crowdfunding Indiegogo, donde ha superado los 500.000 dólares. ¡No más infiernos en la tierra yendo de camping!
Los aparatos de climatización evaporativa
Se trata de una alternativa al aire acondicionado tradicional que no es nueva pero sí relativamente poco utilizada. La climatización evaporativa funciona usando las corrientes de aire y pasándolas por una bandeja llena de agua, de manera que, cuando el agua se evapora, el ambiente se enfría.
Estos aparatos no son contaminantes y suelen ser portátiles (no tanto como el anterior pero sí puedes llevarlos de una estancia a otra con relativa facilidad). El único “pero” sería que dependiendo del modelo, el motor puede hacer un poco de ruido pero compensa por la poca energía que utiliza.
No hay gases refrigerantes de por medio, no es necesario hacer obras y en muchos casos, además de enfriar, eliminan el aire viciado y los olores del ambiente.
Como ves, ganarle la batalla al calor no está reñido con respetar un poco más el medio ambiente o vigilar un poco nuestro bolsillo ;)
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