Si le preguntáramos a Tommy Lee-Jones (protagonista de Volcano) o a Pierce Brosnan (al frente de Dante´s Peak) si le encuentran algo positivo al calor interior de la Tierra, probablemente nos enviarían a paseo. Volcanes de película a parte, ese calor tiene muchísimo potencial y un nombre propio: energía geotérmica. Y es que podríamos estar hablando de una nueva esperanza para las renovables. Vamos a ver por qué.
¿En qué consiste?
La energía geotérmica es la que resulta de aprovechar el calor del interior de la Tierra. A más profundidad, mayor temperatura, ya que no olvidemos que el núcleo del planeta puede superar los 6700 ºC, un infierno tropical, vamos.
Aun así no es necesario ir muy lejos para aprovechar este calor, ya que a unos 3km de profundidad, incluso algo menos, ya podemos encontrar calor suficiente para generar electricidad. A menor profundidad el calor se utiliza para sistemas de agua caliente y climatización mediante bombas de calor.
¿Y cómo se convierte este calor en energía? Pues básicamente a partir de dos tipos de yacimientos, los de agua caliente y los secos.
Los primeros pueden salir a la superficie en forma de géisers o fuentes termales que hemos aprovechado para bañarnos desde tiempos inmemoriales. También podemos encontrarlos a más profundidad en concentraciones subterráneas de agua llamadas acuíferos.
Los yacimientos secos consisten en zonas a no demasiada profundidad con materiales o piedras calientes a las que se les inyecta agua que luego éstas calientan.
Los dos tipos de yacimientos se explotan en centrales geotérmicas mediante diferentes métodos (bombeo, impulsos de flujos de agua y vapor, flujos naturales…) pero en la mayoría de casos el potencial energético se mantiene: a los yacimientos de agua se les reinyecta agua de nuevo y a los secos también, una vez aprovechado el calor.
Ventajas y desventajas
Estos son los principales puntos a su favor:
1. Los recursos geotérmicos son mayores que los recursos de carbón, petróleo, gas natural y uranio combinados
2. Genera unos residuos mínimos (las emisiones de C02 pueden llegar a ser nulas reinyectando el agua en circuitos cerrados) y sus centrales son muy silenciosas
3. El área requerida para instalar una de estas plantas es menor que en las de otro tipo, con un impacto mínimo en el territorio.
Y estos los que juegan en su contra:
1. No es inagotable.
2. Es difícil de transportar como energía primaria y a nivel de generación de electricidad sólo está disponible en ciertos lugares del planeta.
3. En sistemas que no se basan en la reinyección se ha detectado cierto nivel de contaminación de aguas próximas con sustancias como arsénico y amoníaco.
La energía geotérmica en España
Actualmente hay unas 500 centrales geotérmicas en todo el mundo pero ninguna de ellas está en España.
Sin embargo, según los investigadores de la Universidad de Valladolid, con el calor almacenado bajo los 10 primeros km del territorio peninsular se podrían obtener unos 700 gigavatios. Para hacernos una idea, eso equivaldría a 5 veces toda la capacidad eléctrica instalada ahora mismo en todo ese territorio.
Galicia, oeste de Castilla y León, Andalucía y Cataluña son las zonas con mayor potencial geotérmico. Si se apuesta por los sistemas de reinyección y se superan otras barreras ¿podríamos estar hablando de un valor en alza en el campo de las renovables?
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